Fitness, running, crossfit… Últimamente estamos muy internacionales, hasta para hacer deporte. Y es que salir a correr, o realizar cualquier otro tipo de actividad física, es de lo mejorcito para la salud. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la inactividad física es el cuarto factor de mortalidad. Reducirla podría suponer hasta un aumento de 5 años en la esperanza de vida1,2.
Es bien sabido que el deporte es beneficioso para la salud, la prevención de enfermedades, la longevidad y calidad de vida… vamos, para todo. Practicar deporte de manera regular tiene un impacto positivo y directo en nuestro body: aumenta la masa muscular y la densidad mineral ósea, a la vez que ayuda a disminuir la grasa corporal1,2. Por otro lado, contribuye a reducir el sobrepeso y obesidad, cada vez más frecuentes en nuestra sociedad3.
Para empezar a hacer deporte, sin embargo, hay que intentar estar en las mejores condiciones posibles. Esto nos evitará el tener lesiones o fracturas, además de mantener intacta nuestra integridad (y dignidad)2.
Junto a un buen calentamiento, antes y después del entrenamiento es imprescindible una buena alimentación. La dieta del deportista se basa en una dieta variada y equilibrada, incluyendo especialmente alimentos antioxidantes y una buena hidratación2. Aunque Grefusa no puede ayudarte a levantarte del sofá, sí que ponemos nuestro granito de arena para que estés bien alimentado antes y después de tu paseo/maratón/sesión de placer-sufrimiento.
Reservas energéticas: level 1000
Antes, durante y después del entrenamiento es importante que nos recarguemos de energía. Para ello, los cacahuetes constituyen un buen aliado para el deportista. Para empezar, 100 g de cacahuetes suponen hasta 600 kcal, debido en gran parte a su contenido en grasas mono y poliinsaturadas4,5.
La energía aportada también viene de las proteínas. Los cacahuetes son fuente de este nutriente, el pilar básico para nuestro sistema muscular, ya que contribuyen a aumentar y conservar la masa muscular4,5,6.
Aliados del metabolismo
Los beneficios fitness de los cacahuetes no se quedan ahí. Sujétense. Respecto a las vitaminas que aportan, tienen un alto contenido en vitamina B3 o niacina, que contribuye al metabolismo energético normal y además ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga. También son ricos en vitamina E que contribuye a la protección de las células frente al daño oxidativo (efectos antioxidantes)4,5,6,7.
Además, los cacahuetes nos aportan ciertos minerales interesantes en la práctica de ejercicio físico, como el potasio y magnesio. Ambos contribuyen al funcionamiento normal del sistema nervioso y de los músculos. Y además contienen zinc que contribuye al metabolismo normal de los hidratos de carbono, una fuente importante de energía para el deportista4,5,6.
Se recomienda consumir entre 3 a 7 raciones de frutos secos a la semana, siendo una ración 20-30 gramos (sin cáscara). Podemos incluir los cacahuetes a modo de snacks antes de entrenar, o junto al desayuno para los más madrugadores. También son estupendos para después de los entrenamientos, como guarnición de una ensalada fit por ejemplo, recargándonos de energía7.
Así que ya sabéis, ¡a entrenar grefu-runners!